Hay días en los que quiero
congelar cuanto yo siento
olvidarme de lo demás
y concentrarme en tu mirar.
Revivir cada momento
cada beso y cada gesto
y sentir que no hay nada más
que hundida en tus brazos estar.
Y sin embargo comprendo
que no tiene sentido esto
y por más miedo que me da
solo podemos avanzar.
Entender que en este tiempo
construimos los cimientos
para algo lindo de verdad
y vale la pena esperar.